Por Jennifer Niño
Los retos a los que se enfrentan tanto alumnos como profesores de ELE hoy en día han venido creciendo constantemente. Como profesores ya no es suficiente con entrar a clase con un puñado de actividades que trabajen la lengua, pero que no conecten para nada la experiencia ni los intereses de nuestros alumnos con ella. Por su parte los alumnos –sean niños, adolescentes o adultos– se encuentran en una sociedad en la que abunda la información visual. En muchos contextos el texto acompañado de una imagen enriquece el mensaje y aumenta la posibilidad de despertar en el lector su curiosidad por un determinado tema. De ahí que en la enseñanza-aprendizaje de lenguas se planteen alternativas que usen la imagen para potenciar el interés del estudiante y, al mismo tiempo, introducirlo en un contexto comunicativo real. Este es el caso de La casa del acantilado.
La historia
Marcos, un joven aficionado al misterio y los tebeos está cansado del ruido y la contaminación en su ciudad y quiere escapar del estrés por un par de días e ir al campo. Su amiga Marta, una chica hiperactiva y con un carácter muy curioso, decide aceptar su invitación. En su loca travesía llegan a una casa vieja y abandonada. Allí, el tiempo les juega una mala pasada y no tienen otra opción sino la de quedarse allí y esperar. Pero la espera no dura mucho y Marcos convence a su amiga de ir a explorar el área. Su loca excursión les depara un encuentro que cambia el curso de su estadía. Su nueva acompañante, Clara, los lleva a su casa en donde vive un mayordomo muy raro y se esconde un secreto. A partir de ese instante, los chicos se ven envueltos en una desaparición, una sospecha de secuestro, un presunto asesinato y el descubrimiento de un lugar secreto cerca de La casa del acantilado. Y todo esto gracias a que poseen una gran imaginación.
Para aprender con ella
Y como la idea es mejorar el nivel de español, La casa del acantilado ofrece una propuesta didáctica acompañada de ejercicios de vocabulario, comprensión lectora y expresión escrita.
Para ayudar al aprendiz a lanzarse a su viaje detectivesco; está la sección prepárate en donde podrá conocer a los personajes principales y ganar una idea global de la historia. Después de muchas impresiones y en un momento de gran tensión en la historia, se hace una pequeña pausa en párate un momento para recapitular lo sucedido. Aquí lo más interesante es que, con base a el recorrido hasta ese punto, el estudiante tiene la posibilidad de formular hipótesis sobre el desenlace y de practicar la expresión escrita. Al final, en ponte a prueba ellos juegan con la historia y tienen la posibilidad de modificarla con ayuda del bagaje léxico que han visto y ganado a través de la lectura.
La casa del acantilado presenta entonces un material rico en imaginación, humor y trabajo léxico para niveles A1 y A2. Marcos, Marta, Clara y hasta el extraño Sebastián llevarán a lectores de todas las edades a divertirse un poco con una historia llena de lugares y acontecimientos tratados en clave de humor e intriga.
Puntos fuertes
Las ventajas del cómic como herramienta en la enseñanza del español han venido aumentando sustancialmente en los últimos años. Y es que este material es una forma idónea para presentar textos –y más exactamente textos narrativos– apoyados en el valor agregado que concede lo visual. En nuestra opinión, la imagen en el cómic cumple cuatro funciones básicas donde vemos las ventajas de este género:
- Representa: Repite el texto de los diálogos y refuerza la comprensión de los mismos.
- Transforma: La imagen en el cómic enfoca la información crítica o difícil y la transforma en un input más fácil de procesar, uno con un menor desgaste cognitivo.
- Organiza: Lo visual realza la coherencia del texto.
- Atrae: La imagen capta y aumenta el interés del lector y lo anima a continuar la lectura.
Los aspectos antes mencionados aplican no solo a los cómics en la lengua materna. En una segunda lengua, estos adquieren otro valor: el aprendizaje se expone en un contexto real que a su vez conecta el bagaje lingüístico del aprendiz con su experiencia y su interés por la lengua meta. La casa del acantilado trae esta narrativa gráfica al aula de ELE y plantea una historia de aventuras y humor para estudiantes de niveles A1 y A2. Con ayuda de este cómic queremos plantear sus puntos a favor en el aprendizaje del ELE.
El lenguaje del cómic
El cómic representa diferentes niveles del lenguaje y expone al mismo tiempo diferentes modelos del discurso de un nativo. Su riqueza expresiva va desde la presentación de titubeos, frases interrumpidas, reproducción de sonidos, sustitución de palabras por signos, frases cortas, exclamaciones, elipsis y hasta entonaciones. El atractivo de este tipo de lenguaje puede ser más realzado cuando el alumno pone en práctica destrezas del lenguaje oral que a veces tardan más en aparecer; sobre todo en los primeros niveles y en contextos de no inmersión. Además, el lenguaje del cómic es de un registro informal, del día a día, del diálogo entre amigos y conocidos. Para el alumno, la presentación de ejemplos claros de este registro constituye un impulso para introducir en sus diálogos patrones que encuentra en los cómics.
Entrenamiento de estrategias
El cómic ofrece un material auténtico con el que se pueden desarrollar, entrenar y potenciar estrategias como la comprensión lectora global o selectiva, la síntesis, el análisis crítico, la lectura en voz alta y el trabajo con secuencias de tiempo-espacio. Existen, además, tácticas y estrategias pragmáticas que suelen encontrarse en este tipo de materiales. La combinación de texto e imagen hace más fácil el trabajo con la ironía, las comparaciones, las hipérboles, las reformulaciones o incluso las ambigüedades. Lo que en muchas ocasiones implica más trabajo y tiempo para exponerle al alumno esta temática, el cómic lo presenta y resuelve en un menor tiempo.
El léxico
Las historias gráficas, y en general las historias, facilitan la presentación de vocabulario en un contexto lleno de repeticiones y el cual le otorga la posibilidad al estudiante de confirmar continuamente su significado. Este tipo de material permite introducirlo, repetirlo revisarlo y aclararlo. El estudiante llega a sentirse tan cómodo leyéndolo que incluso puede olvidar que lo está haciendo en una L2 y ¿por qué?… Porque es atractivo y comprensible (Hipótesis del Input comprensible de Krashen).
El alumno y su relación con género narrativo
Leer textos en una lengua extranjera no es una de las primeras prioridades de muchos estudiantes y más aún cuando se trata de extensos textos. Dependiendo del contexto del estudiante, muchas veces puede transcurrir bastante tiempo hasta que él/ella tome el riesgo de empezar una lectura sin abandonarla a mitad de camino. En estos casos el cómic nos proporciona a los profesores un ancla: un recurso para captar su atención e interés por la lectura y para que al final ellos se sientan motivados. Justamente, la facilidad en la comprensión hace que el lector se acerque más a los caracteres y se sienta más dentro de la narración. Por último, no se debe pasar por alto que los colores y la versatilidad de los caracteres son más atrayentes que en otros tipos de textos y, lo mejor de todo, no se tiene que sacrificar la trama o el vocabulario.